La gallina sureña, también conocida como gallina andaluza sureña, es una raza de gallinas perteneciente a la región de Andalucía, España. Esta gallina tiene características específicas que la diferencian de las demás razas de gallina.
Además, es una de las razas más apreciadas por los avicultores españoles, por lo que, luego de un proceso de recuperación de esta especie, han surgido diversas iniciativas para que su producción y crianza crezca más.
Historia
El uso de la gallina se remonta a la antigüedad, pues los cartagineses y romanos, quienes invadieron la península ibérica, y supieron aprovechar a estas gallinas. Además, dejaron un registro amplio tanto en mosaicos como en su literatura. Sin embargo, con la llegada de los árabes, fueron estos quienes tuvieron más interés en estudiar y aprovechar estas aves tanto en el aspecto culinario como en lo productivo.
Esta gallina era muy común en el siglo XIX. Su fama o popularidad era tal que incluso estuvo incluida en el jardín Botánico de Madrid alrededor de 1864. Sin embargo, con el pasar del tiempo, la gallina sureña fue decayendo en popularidad.
De esta forma, quedó relegada solo a los espacios rurales, es decir, a la cría en el campo. Así, la gallina sureña fue cayendo en el olvido, quedando relegada, prácticamente en los campos rurales.
Sin embargo, a principios del siglo XXI, el interés por esta raza fue adquiriendo importancia; tanto así que despertó el interés de criadores, así como de productores. Por este motivo, se puso especial interés a su recuperación; esto implica también a mejorar de forma genética la raza.
En la actualidad, existen varias asociaciones de productores y criadores de gallinas sureñas en España cuya finalidad es preservar y producir esta raza para la cría y el consumo humano, ya que estas son una importante fuente de proteínas gracias a sus huevos y su carne.
Características
La gallina sureña, o andaluza sureña se caracteriza por ser pequeña y ágil. Además, esta raza de gallinas crece de forma lenta; es solo cuando llega a cumplir un año de edad cuando alcanza su desarrollo pleno.
El peso de las gallinas oscila entre los tres kilos a cuatro; aunque el promedio regular es de tres kilos y medio. Hay que tener en cuenta que los gallos pesan un poco más que las gallinas.
Además, los huevos suelen ser de cáscara blanca, y pueden llegar a pesar un poco más de sesenta y cinco gramos. Por otra parte, sus plumas son largas y están muy ceñidas o juntas al cuerpo. Además, estas son brillantes, y en el caso de los gallos, este cuenta con plumas en una especie de formas de adorno. Te recomiendo ver: Ponederos Copele para Gallinas
Además, hay que señalar que las gallinas también presentan dimorfismo sexual. Esto quiere decir que existen diferencias sustanciales entre el macho y la hembra de la especie. De esta forma, por lo tanto, podrán ser reconocidos. Esto es notable, ya que existen especies de aves, como en algunos loros, donde el dimorfismo sexual no existe.
Además, la gallina sureña también presenta diferencias notables con respecto a otro tipo de gallinas, como la gallina piroca o la gallina wyandotte, entre otras.
Dimorfismo sexual
El dimorfismo sexual no es otra cosa sino la diferencia, o más bien, rasgos distintivos que diferencian al macho de la hembra. Dentro del dimorfismo sexual, algunas de las características resaltantes son:
- Diferencias en el tamaño entre el macho y la hembra.
- Diferencias en la relación del peso.
- Otros rasgos distintivos, como el color de las plumas, diferencias en los ojos, etc.
De esta manera, como ya se ha mencionado, se puede distinguir y reconocer al macho de la hembra. Esto forma parte de la morfología de las gallinas.
Morfología
La morfología consiste en los rasgos notorios de las gallinas. En otras palabras, la morfología está relacionada con la anatomía de la gallina, en este caso de la gallina sureña.
Como sabemos, las gallinas pertenecen al grupo de las aves. De hecho, el nombre científico de las gallinas es gallus gallus domesticus; en el caso de la gallina sureña, esta es una subespecie, esto quiere decir que forma parte de esta familia por las características anteriormente descritas.
Por lo tanto, son animales vertebrados que cuentan con plumas y alas; y tienen dos patas. Rasgos definitorios de todas las aves. Pero es importante también conocer las diferencias entre la gallina y el gallo de la familia de la gallina sureña.
Gallo
En el caso del gallo, esta cuenta con una cabeza un poco larga, además de lisa. Esta también suele ser ancha, además de gruesa.
En cuanto a su cresta, esta es más bien sencilla y simple, está perfectamente conformada y desarrollada; es gruesa y grande en su base. Tiene cinco dientes que están todos bien derechos y bien definidos. El espolón continúa por la línea del cuello.
Sus barbillas suelen ser anchas y largas, además de lisas. En cuanto a las orejillas, estas son un poco largas, tienen forma de bellota, no muy grandes; son de color blanco.
En cuanto al pico, este es fuerte y de tamaño medio. En algunos, el color del pico es corneo, aunque también puede ser de color blanco puro, o más bien de un color ligeramente rosa. Hay gallos que cuentan con nerviaciones de color oscuro.
Los ojos tienen un color castaño, aunque este puede variar. En cuanto a su cuello, este es largo y grueso. Su tronco está inclinado hacia atrás y también es largo.
En cuanto al dorso, este tiende a inclinarse un poco a la cola; pero también es plano y ancho. De pecho profundo, este es de forma redonda y por lo general, también es de forma erguida
Su abdomen también cuenta con características similares: es ancho y desarrollado, además de profundo.
La cola no es tan grande, tiene forma de arco, esta forma un ángulo de unos noventa y cinco grados. Sus alas están ceñidas al cuerpo y son fuertes. Los muslos están repletos de plumas, mientras que las extremidades inferiores, es decir, las patas, carecen de ellas.
Sus tarsos están limpios de plumas, además de ser largos y gruesos, son proporcionales al cuerpo. Algunos tienen ligeras manchas oscuras.
Gallina
Las características de las gallinas son parecidas a las del gallo, solo que, debido al dimorfismo sexual, presenta diferencias relacionadas con el sexo. En este sentido, las diferencias hacen que se puedan notar y distinguir de los machos, es decir, de los gallos.
En este sentido, su cabeza es, más bien, fina y con cierta elegancia, no muy grande y un poco más alargada; además, una característica interesante es que tiene un pequeño matiz aguileño.
La cresta en el macho, como vimos, es más grande y erguida. En la hembra, en cambio, es caída, y por lo general, le tapa un ojo. Las orejillas no son muy grandes, además de ser ovaladas.
En el caso de sus barbillas, estas son suaves y flexibles. Además, son más pequeñas que las del macho. Su pecho es prominente y un poco ancho. En el caso de la quilla, esta es larga y un poco curva.
Su cola está recogida y escasa de plumas. Además de estar tendida. Hablando de su abdomen, este es amplio y con forma de globo. Su plumón trasero es espeso y muy desarrollado. En cuanto al dorso, este es ancho, además de plano. También tiene forma recta y con una ligera inclinación hacia la cola.
Alimentación
La alimentación de la gallina sureña dependerá de varios factores importantes, tales como el entorno y su propósito de cría. Esto quiere decir que, si está en un entorno natural, como en una granja, ellas pueden procurar buscar su alimento, además de aquel que se le da.
Además, necesita de proteínas y otros elementos nutritivos para que puedan crecer sanas y saludables. Además, si se van a usar como ponedoras de huevos, las gallinas necesitarán, además, elementos suplementarios que contenga calcio y fósforo. De esta manera podrán poner huevos de buena calidad.
Así que hay que tener en cuenta estos factores al momento de alimentar a la gallina sureña. Esto quiere decir que la alimentación en las gallinas es muy importante.
Como ya se mencionó, si la gallina se cría en una granja al aire libre, esta puede buscar su alimento escarbando en la búsqueda de gusanos y otros insectos que le ofrecen los elementos nutritivos que necesitan.
Pero esto no quiere decir que no se le alimentará. Por eso, es importante darles o suministrarles alimento. En este caso, existen dos opciones:
- Suministrarle el pienso adquirido en una tienda avícola. Este ya vendrá preparado de acuerdo a las necesidades de la gallina. Por otra parte, también se podrá comprar el pienso o las semillas por separado, así se podrá suministrar los nutrientes necesarios de una forma mucho más balanceada.
- En la línea de esta opción, un factor alternativo es hacer el pienso por cuenta propia. Pero también es importante suministrarle a la gallina otro tipo de alimentos como frutas y algunos granos como el de maíz.
Tampoco hay que descartar la opción de suministrarles un poco de carne junto con la comida que se le da. Por lo general, la carne de pescado es una buena opción para que obtenga las proteínas que las gallinas necesitan.
En el caso de que las gallinas sean ponedoras, estas necesitarán una fuente alimenticia rica en calcio, esto con el fin de evitar la osteoporosis ya que, a la hora de poner los huevos, se extrae el calcio de sus huesos, lo que hace que sus huesos se debiliten más rápido.
Así que los nutrientes que más necesitan son, en esencia: Fósforo, calcio y proteínas. De hecho, hay quienes prefieren adelantar su crecimiento, por esta razón, dentro del alimento, añaden elementos que contienen hormonas del crecimiento. Así, se acelera el proceso para obtener beneficios inmediatos.
Crianza de la gallina sureña
Para criar una gallina sureña no se necesita de grandes instalaciones. Claro, esto en caso de que se críe de forma casera. Lo importante es que tenga instalaciones cómodas y espaciosas, de esta forma pueden ser más productivas.
Las condiciones de la granja deben ser apropiadas. Un gallinero o corral debe ser lo suficientemente grande de acuerdo a la cantidad de gallinas que se estén criando. Es importante tener en cuenta que estas gallinas pertenecen al clima del mediterráneo, que suele ser templado. Por esta razón, es difícil que pueda adaptarse a otras regiones que no sean su zona autóctona.
Es importante hacer cubículos con forraje para que la gallina ponga los huevos. En caso de que estos estén destinados para la cría, lo mejor que se puede hacer es separarlos y llevarlos a cámaras de calor, donde, con luz artificial, podrán ser incubados.
La razón de esto es que estas gallinas no acostumbran a incubar sus huevos, puesto que son más que todo, gallinas de posta. Por esta razón, si se quiere obtener polluelos para la cría, hay que hacerlo a través de los medios artificiales.
Por este motivo, es importante también preparar una cámara para la incubación. Además de polluelos para cría, los huevos que ponen también se pueden usar para el consumo humano. De hecho, la mayor parte de la producción de huevos de esta gallina está destinada para este fin.
Esta gallina puede llegar a poner hasta doscientos huevos al año. Ahora bien, en caso de que se vayan a incubar los huevos para su reproducción, hay que tener en cuenta varios factores, como es el de la iluminación en el proceso de incubación.
Incubación
Si bien necesitan el calor, no deben estar expuestos a temperaturas tan altas. El período de incubación oscila entre los veintiún a veinticinco días. De esta forma, la especie se incrementa. Ahora bien, es importante mantener bajo control la incubadora para que los huevos puedan eclosionar a tiempo; también es importante que se controlen factores como la humedad y la temperatura para que el pichón pueda nacer sano.
Luego de la incubación viene el proceso de cría. Como ya se mencionó anteriormente, es mejor criar a estos animales en granjas donde puedan tener libertad de movimiento. Si bien se pueden mantener en corrales de cría, la verdad es que esto podría traer problemas de salud, no solo para las gallinas, sino también para el ser humano.
Por esta razón, es recomendable adaptar un sector de la granja para la convivencia de los polluelos hasta que logren alcanzar la edad apropiada para comenzar con su producción de huevos.
Esta es la manera más apropiada que recomiendan muchos criadores de esta especie. Sobre todo, porque es una especie que está surgiendo de nuevo. Por lo tanto, lo más recomendable es tener a la gallina sureña en condiciones cómodas donde puedan adaptarse. De esta forma, se obtendrán buenos resultados.
Variedades
Al ser una raza emergente, por decirlo de alguna manera, la gallina sureña, o andaluza sureña, se suele confundir con otras razas autóctonas de España. La confusión surge debido a que presenta características similares con las demás especies.
Sin embargo, como se vio, estas gallinas presentan sus características particulares; esto quiere decir que de acuerdo a su composición morfológica, esta se diferencia de otras razas, como la gallina castellana, quien también es originaria de la península ibérica.
Ahora bien, las variedades de la gallina sureña tienen que ver más con el color que con cualquier otro rasgo distintivo. Es decir, en el proceso de recuperación de esta raza en específico, se comenzaron a hacer cruces genéticos para tener una variedad interesante de esta raza. Pero como ya se mencionó, la diferencia o el rasgo distintivo más grande tienen que ver con el color.
Así que estas son algunas de las variedades de la raza de la gallina sureña. Es importante tenerlas en cuenta para poder distinguirlas.
Franciscana
Esta variedad se distingue porque combina su color por una especie de listas que van de color blanco un poco opaco, más bien grisáceo, además de gris oscuro en cada una de sus plumas. En líneas generales, el color del macho suele ser más claro que el de las hembras.
Ceniza
El color de estas gallinas ceniciento claro y además difuminado. No tiene ribetes en las plumas; sin embargo, en algunas de estas se puede notar una especie de salpicadura de color, ya sea blanco o negro. En el caso de los machos, tanto el cuello, así como el dorso y las cobijas externas tienen una coloración o entonación del color más oscura que en el resto de su cuerpo. En el caso de las hembras, esta tonalidad oscura se da solo en el cuello.
Negra
Esta gallina es tal cual como su nombre, negra. Sin embargo, posee reflejos metálicos de colores azulados y verdosos en toda su capa. La diferencia entre el macho y la hembra, en este caso, es el dimorfismo sexual.
Blanca pura
Estas gallinas son de color blanco, sin ningún tipo de mancha ni motas o salpicaduras de colores. Por esta razón, se le considera como la gallina sureña blanca pura sin manchas. Al igual que la negra, la diferencia entre ambos sexos es el dimorfismo sexual.
Blanca salpicada de gris
Esta gallina se deriva de la gallina sureña ceniza; sin embargo se le considera una variedad más de esta raza; claro que para cumplir las condiciones, es decir, para que se le clasifique dentro de la raza sureña, debe cumplir con los parámetros ya descritos de esta raza.
También están las variedades perdiz y la variedad plata. Ambas variedades presentan cambios sustanciales en cuanto a los colores en los machos y las hembras. Estos rasgos son distintivos para cada miembro de estas variedades.
Ahora bien, hay autores que reconocen estas variedades como parte de la gallina sureña. Sin embargo, hay quienes las clasifican como razas diferentes, o variedades incluso de otras razas. Esto se debe, principalmente, al cruce que existe entre diferentes razas; pero también a las semejanzas que hay entre ellas.
Distribución
Como ya se ha mencionado en varias ocasiones, la gallina sureña es autóctona de la península ibérica, concretamente, de España.
Esta especie, o raza, está más asentada en la región de Andalucía. Esta región comprende las ciudades de Málaga, Sevilla, Córdoba, Granada, Huelva Jaén, Cádiz y Almería. Como se puede ver, en esta región habita, o es autóctona la gallina sureña. Por esta razón, también es llamada gallina andaluza sureña; e incluso, algunas de las variedades adquieren el nombre del lugar de origen.
Por esta razón es que surge la confusión anteriormente mencionado. Si bien estas gallinas pueden soportar los climas fríos; su región o hábitat natural se encuentra específicamente en esta región.
Ahora bien, la utilidad de la gallina sureña, además de lo ya sabido, esto es, su uso para el consumo humano a través de su carne y sus huevos, también tiene una utilidad importante en su entorno o ecosistema.
Esto se debe a que, al estar en una granja y suelta en su corral, o ya sea en estado de libertad, esta gallina, así como el resto de sus variedades, puede ayudar con el control de las plagas.
En este sentido, al buscar su propio alimento, puede consumir insectos que pueden ocasionar problemas en el ecosistema. Por esta razón, es una buena manera de combatir las plagas de forma natural.
Por esta razón es que se recomienda su cría en granjas al aire libre. Además, como es una especie en recuperación, esto favorecerá mucho más a que aumente la población de la gallina sureña.
Defectos y enfermedades
Debido a que se han usado técnicas genéticas para recuperar a la gallina sureña, estas tienden a presentar problemas relacionados con estos defectos genéticos.
Aunque algunos no son graves, pues tienen que ver más con su apariencia que con la calidad de huevos y de la carne. Aunque hay casos en que las gallinas no pueden sobrevivir; pero esto está relacionado más con algunas enfermedades que afectan a estas aves.
Algunos defectos son los siguientes:
Orejillas: Esta puede estar excesivamente redondeada, causando problemas. Además, puede que más del treinta por ciento de la misma sea de color rojo.
Cresta: los apéndices pueden llegar a tener más de seis dientes. En el caso de los machos, su cresta puede tener un doblez, o incluso esta puede estar caída.
Ojos: En el caso de los ojos, puede haber distorsión entre los colores. Esto quiere decir que uno puede ser negro, mientras que el otro puede ser de otro color.
Cola: la cola del gallo tiene menos porcentaje de inclinación sobre el dorso. En otras palabras, está ardillada. En el caso de la gallina, esta puede estar muy poblada y tener forma de hacha.
Pico y tarsos: estos tendrán un tono amarillento, o también puede ser de color verde o de otros colores que no sean los característicos, como el gris o el blanco.
Estos defectos podrían indicar un desmejoramiento en la raza. Sin embargo, no quiere decir que esté en peligro, pues son cosas que, a través de la genética, se pueden solucionar.
En cuanto a las enfermedades, la gallina sureña tiende a ser resistente a las enfermedades comunes. Sin embargo, esta resistencia tiene que ver también de acuerdo a la forma en que se críe.
Esto quiere decir que, en condiciones normales, puede ser resistente a enfermedades como la gripe u otras comunes. Sin embargo, en estado de cautiverio, estas pueden ser mortales. Esto debido a que, en las granjas industriales cuentan con muy poco espacio.
Al contar con poco espacio y estar todas juntas, las enfermedades se transmiten y se propagan de forma muy rápida. Esto llevaría a que se genere una epidemia, causando la pérdida irreversible de las crías y las gallinas en general.
De hecho, esta es la mayor preocupación de todas las granjas y los criadores de gallinas. Por esta razón, muchos hacen lo posible por crear gallineros adecuados y bien ventilados, preferiblemente al aire libre.
De hecho, lo recomendable es que no se tengan tantas gallinas por corral. En otras palabras, es imperante y necesario evitar el hacinamiento.
Una enfermedad que puede ser mortal, además de la gripe aviar, es la parasitosis. Esta se puede transmitir a través de las heces. Por lo tanto, es muy importante mantener los corrales limpios. Esto implica hacer limpieza constante. Además de mantener un sistema de ventilación eficiente.
Conservación
Como ya se ha mencionado, es una especie que estuvo a punto de desaparecer. A pesar de que se mantenía entre los campesinos de la zona, es en fechas recientes donde se organizaron varios grupos para preservar y conservar a la gallina sureña.
Esto implica criar y aumentar las granjas de producción de dichos animales. Si bien en la actualidad existen ciertos problemas para su crianza, lo cierto es que las diferentes asociaciones que existen en España para la preservación y difusión de la gallina sureña hacen sus esfuerzos para criar estas gallinas, y así sacarles el máximo provecho.
Por esta razón, estas asociaciones se encargan de informar a los granjeros, además de ofrecer asesoría técnica sobre el cuidado y la alimentación, así como la prevención de las enfermedades; además de las ventajas que representa criar a la gallina sureña al aire libre.
https://www.youtube.com/watch?v=ylHSEpYF0YA
Actualizado el 27 abril, 2020