El halcón pechirrojo (Falco deiroleucus) es una variedad de ave falconiforme de la familia Falconidae que suele habitar desde el sur al norte de Sudamérica. Es igualmente conocido como halcón pechinaranja, colorado o negro grande, y no se le conocen subespecies.
Al parecer está muy relacionado con el halcón murciélago (Falco rufigularis), del cual pareciese ser una versión más grande, lo cual lleva a confundirlos fácilmente. A la vez ambos son muy cercanos al halcón aplomado (Falco femoralis) y conforman una estirpe americana muy antigua de la familia Falconidae.
Distribución y Hábitat del Halcón Pechirrojo
A través de la historia, el área de distribución del halcón pechirrojo pudo haberse extendido desde el sur de México hasta el norte de Argentina. En América Central, ese espacio se ha reducido en la actualidad a apenas un 4% del área que anteriormente ocupaba, en la que aún permanece una reducida población de alrededor de 30 parejas en Belice, Guatemala y Panamá.
Los investigadores consideran que su población en América del Sur también se encuentra en problemas desde 1970, de acuerdo a los registros de la especie. La densidad poblacional de esta ave en ese territorio es poco conocida, no solo por su rareza sino porque se encuentra geográficamente muy dispersa.
Esta ave puede localizarse en Colombia, este de Venezuela, Guayanas, Surinam, Trinidad y Tobago, noreste y suroeste de Ecuador, este de Perú, norte y este de Bolivia, Paraguay, norte de Argentina, noreste, sur y centro oeste de Brasil. De acuerdo a algunos estudios, su población total jamás debe haber excedido de unos pocos millares de especímenes, cantidad que actualmente debe ser inferior.
Siempre se ha considerado al halcón pechirrojo como una especie rara en razón de su hábitat especializado, ya que acostumbran anidar en altos desfiladeros y vivir en grandes zonas de bosque tropical vírgenes. Asimismo, en Guatemala y Belice prefiere vivir en regiones en donde el clima es predominantemente tropical, ya que suelen aprovecharse de la humedad que ofrece dicho nicho.
Las razones por las cuales ha venido disminuyendo su población no se han podido determinar, aunque se ha planteado que otras especies como tucanes o buitres negros podrían haber depredado sus nidos. Mediante el uso de cámaras de video en varios de sus nidos se pudo registrarse como una hembra de pechirrojo que incubaba era parasitada por un murciélago vampiro.
Características
Tanto el macho como la hembra son muy parecidos. Exhiben color amarillo en patas, cera y anillo orbital. En su cabeza presenta una especie de casco de color negro, su espalda es de un negro-azulado, los bordes de sus plumas son de gris-azulado y su cola de tonalidad oscura cuenta con seis franjas de color pardo-claro.
Su garganta y babero son de color blanco, se prolonga por los laterales del cuello para luego convertirse en un rojizo-naranja en las mejillas y en la parte trasera de la cabeza. La parte superior de su pecho es de color pardo-claro a rojizo-naranja, su sección media es de coloración negra con barras café-rojizo, el cual se hace más pálido y resaltante en los costados.
De color pardo-naranja intenso son su abdomen, tibias y coberteras infracaudales, presentando ocasionalmente estas últimas barras blancas y negras. Los ejemplares jóvenes son más pálidos que los adultos. Exhiben un tono negro-parduzco en espalda y cola, su pecho es de un color pardo-pálido con barras café-oscuro en los costados y su cera y anillo ocular son verde-azulado pálido.
En comparación con otros halcones, sus patas son bastante grandes en relación con su tamaño, asimismo su pico es desproporcionadamente grande. Cuenta con poderosos talones con los que atrapa las presas en vuelo, y según algunos investigadores ocupa el nicho ecológico del halcón peregrino (Falco peregrinus) en la América Tropical.
El hecho de contar con patas y garras grandes con respecto a su tamaño, así como con un pico más grande de lo usual, dota a la especie de un armamento pesado muy ventajoso. La hembra del halcón pechirrojo, regularmente de mayor tamaño, no solo utiliza estas herramientas para manejar las relaciones sociales dentro de su grupo familiar, sino que también las emplea para defender el nido.
Siendo aún jóvenes, logran desarrollar extraordinarias habilidades para volar mediante el trabajo duro y la continua práctica.
Tamaño
Se considera como un ave de tamaño mediano, donde el tamaño de la hembra casi duplica al del macho. Esta es la mayor diferencia existente entre las 40 especies de halcones conocidas. El tamaño de la hembra va de 38 a 40 cm y el del macho de 35 a 36 cm. Su envergadura de alas es de alrededor de 83 cm.
La hembra suele pesar de 550 a 700 g, mientras que el peso del macho fluctúa de 325 a 425 g.
Alimentación
La notoria diferencia entre el tamaño de la hembra y el macho del halcón pechirrojo, al parecer, es una adaptación que posibilita a la pareja elegir presas de distintos tamaños, ya que es el macho el que atrapa las presas más pequeñas y la hembra se encarga de las más grandes.
Al igual que la mayoría de las especies de halcones, los pechirrojos son mayormente cazadores de aves. Su dieta se compone de aves de pequeño a mediano tamaño, sobre todo palomas, periquitos, vencejos, trogones, playeras, tórtolas, tángaras, golondrinas, pájaros carpinteros y loros.
Igualmente se alimentan de insectos grandes y capturan murciélagos al atardecer y antes del amanecer. Son cazadores aéreos, ya que atrapan sus presas mientras vuelan.
Se les ha observado en hábitats de vegetación más densos que los del peregrino, de modo que no compiten ecológicamente con el peregrino migrador que acostumbra invernar en Sudamérica.
Comportamiento
El halcón pechirrojo vuela con suma rapidez y, aunque su velocidad no ha sido objeto de estudios, los investigadores que han observado a estas aves persiguiendo a sus presas, estiman que podrían ser aún más veloces que el halcón peregrino, uno de los animales más rápidos del planeta.
Esta ave rapaz dispone de diversas estrategias de caza para atrapar a sus presas. A la que más recurre es apostarse en perchas elevadas y expuestas, como árboles o estructuras hechas por el hombre, desde donde contarán con una panorámica excelente del entramado superior de los árboles o de los valles adyacentes.
Tras identificar a la presa, emprenden vuelo para perseguirla sobre los árboles, en ocasiones remontándose abruptamente en el aire antes de dejarse caer sobre ella. Otras estrategias que emplea esta ave son: perseguir rápidamente a su presa en vuelo horizontal o explorar el horizonte en busca de vencejos y otras especies de alto vuelo y ascender hasta obtener lo que será su próximo alimento.
Un investigador registró tres casos en la que ambos miembros de una pareja de halcones pechirrojo iban juntos tras la misma presa.
Una de las más curiosas costumbres que se le ha observado a los halcones pechirrojos es cuando se estrellan intencionalmente contra hojas de árboles que han acumulado agua, ello con la finalidad de ser bañados con el líquido que sale impulsado con el impacto.
Reproducción
Al igual que la mayor parte de las especies de halcones, los pechirrojos muy raramente construyen sus propios nidos. Lo que suelen hacer con frecuencia es excavar pequeñas depresiones en el sustrato de las salientes rocosas o en las hendiduras de los despeñaderos o sumideros. Se logró observar a una pareja anidando en un templo maya en el Parque Nacional Tikal de Guatemala, asimismo se supo de un caso de un nido de halcón pechirrojo en una palmera.
En América del Sur, los investigadores han reportado casos donde los halcones pelirrojos han anidado bajo agrupaciones de plantas que crecen bajo árboles de mayor tamaño, en agujeros naturales de árboles grandes, al pie de hojas de palmeras y en desfiladeros.
En un lapso de seis días, la hembra usualmente libera de uno a tres huevos de color marrón-rojizo de tamaño algo grande. En contraste a otras especies de halcones, la hembra del pechirrojo, es la que mayormente se encarga del proceso de incubación, el cual suele tomar unos 30 días. Igualmente debe criar a solas sus polluelos por dos semanas.
Mientras la hembra se encarga de mantener a una temperatura apropiada tanto a los huevos como a las crías, el macho debe esmerarse en cazar y traer de vuelta el alimento para la madre y los polluelos. De llegar a morir el padre, las probabilidades de sobrevivir los polluelos se minimizan, ya que la madre no suele abandonar el nido.
La consecución de alimento es una tarea ardua para el macho y tras el nacimiento de los polluelos, debe continuar siendo diligente en la procura de abundante comida para alimentar a su familia. En numerosas ocasiones al día, debe salir del nido para retornar con presas, las que generalmente son aves a las que previamente les ha quitado todas las plumas, alas y patas.
No es sino hasta 40 días tras la eclosión, que los polluelos comienzan a volar. No obstante, deberán pasar hasta 5 meses para que decidan alejarse del territorio de sus padres, tiempo durante el cual aprenden a cazar y vivir sin el cuidado permanente de sus progenitores.
A lo largo de esos delicados meses en la vida de los polluelos, el alimento de los padres nunca llega a faltar. En ese lapso los padres se ahorran el trabajo de despedazar sus presas para proporcionarles pequeños trozos de alimento, ya que les traen presas completas de modo que aprendan a rasgar la carne para alimentarse por su cuenta.
Generalmente es alrededor de los dos o tres años que los ejemplares jóvenes de halcones pechirrojo alcanzan su edad reproductiva.
Conservación
Al halcón pechirrojo se le ha catalogado a nivel internacional como una especie Casi Amenazada. La deforestación es una de las más importantes amenazas a la que hace frente, no obstante muestra cierta tolerancia a dichos eventos ya que se le ha observado anidando en sitios afectados.
Un problema que también les afecta y que deriva de la deforestación es que se ve forzado a desplazar sus lugares de anidación ante la creciente presencia del buitre negro Común (Coragyps atratus), ave de rapiña que frecuentemente invade las áreas deforestadas por el hombre y que puede comer casi cualquier cosa.
El halcón pechirrojo igualmente podría resultar afectado por la aparición de abejas africanizadas, así como por la constante circulación de turistas por los alrededores de sus sitios de anidación. La pérdida o alteración de su hábitat a causa de la tala indiscriminada, la agricultura y la construcción de infraestructuras es tal vez el mayor desafío que enfrentan estas aves.
La cada vez mayor presencia humana dentro de su hábitat, implica la disposición de depósitos de basura, a los cuales se sentirán atraídos los buitres negros. Estas aves carroñeras podrían rivalizar con los halcones pechirrojos por los acantilados para anidar y es bastante probable que también consuman sus huevos y sus polluelos.
La alteración de su hábitat, su fragmentación, los conflictos humanos y la depredación natural explican en gran medida la severa reducción del área de distribución de la especie y su permanente declive local.
Se ha podido demostrar que esta especie, que en un principio fue de hábitat de montaña, se ha visto forzada a abandonar ese santuario para cazar palomas salvajes y tórtolas de collar en las tierras bajas y en las ciudades cercanas, donde las aves rapaces suelen ser perseguidas como plagas.
La expectativa de vida de un halcón pechirrojo adulto es de apenas 2,57 años según los más recientes estudios de anillamiento. Aun así y pese a su poca densidad poblacional y a situación de vulnerabilidad, los halcones pechirrojo aparentemente cuentan con ventajas de supervivencia únicas:
- Suelen anidar en desfiladeros imponentes en un hábitat de montaña remoto y abrupto, el cual ocupan durante todo el año.
- Triplican el cuidado de sus crías con respecto a otras variedades de halcones.
- Su vida reproductiva de 10 años o más, puede considerarse potencialmente larga, al igual que ocurre con otras especies de halcones, pero su tasa reproductiva es preocupantemente baja.
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Actualizado el 28 junio, 2022
